El libro recorre la historia del género en nuestro país entre 1978 y 1985

«Inoxidable»: una reivindicación académica del heavy español

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Los primeros años ochenta del siglo xx en nuestro país están marcados culturalmente por la movida, un movimiento también social que, sin duda, agitó la España posfranquista con su prurito iconoclasta y que hoy se añora, sobre todo, por haber sido el caldo de cultivo de un buen número de grupos de pop que renovaron la escena musical y que vuelven a estar de actualidad, empujados por la necesidad de nostalgia posmoderna que la publicidad tan bien está sabiendo rentabilizar y explotar.

Sin embargo, esta foto suele dejar fuera otras músicas que en su momento, como el heavy, fueron cuantitativamente mucho más importantes, pero que los grandes medios de comunicación han ido olvidando o relegando al cajón de los movimientos marginales. El heavy nació y se nutrió de grupos y de seguidores en los extrarradios de las grandes ciudades industriales, sobre todo de Madrid y del País Vasco, zonas empobrecidas, en algunas ocasiones sin apenas infraestructuras ni servicios básicos y donde la heroína se cobró decenas de víctimas.

El heavy, como el punk, fueron los movimientos que supieron conectar con la frustración desarraigada de una clase social que se sentía olvidada y despreciada, pero que encontró en la música una vía de escape y, por encima de todo, un sentimiento de pertenencia colectiva, lejos del conformismo amable e inofensivo del pop.

Para tratar de llenar este vacío histórico y romper con los estereotipos de un género fundamental en nuestro país, Fernando Galicia, doctor en Historia y Ciencias de la Música y profesor superior de guitarra, ha escrito Inoxidable (Apache Libros, 2017), una tesis doctoral reconvertida en un libro de más de seiscientas páginas que aborda desde un punto de vista académico la formación y el crecimiento del heavy metal en España entre 1978 y 1985. El análisis, tal y como cuenta Galicia, se detiene en 1985 porque entonces empieza «una etapa de diversificación» en los estilos (rock duro, trash, speed…) que daría para otra tesis.

Inoxidable, que puede leerse como «un manual un poco atípico o un libro de consulta», según explica su autor, no solo hace un recorrido cronológico del género (su evolución dentro del contexto político, social y cultural de la época), sino también un análisis tanto musical como de contenido: se estudian más de trescientas canciones (estructuras, tonalidades, tiempos, compases…), así como los nombres de las bandas o letras de canciones. Además, cuenta con 72 fotografías «inéditas o muy poco vistas», la mayoría realizadas por Paco Manzano.

El ensayo se presentó este miércoles en Madrid, en la sede de la SGAE, un acto en el que Fernando Galicia estuvo acompañado, además de por Paco Manzano, por el editor de Apache Libros, José Luis del Río, y por el periodista musical Mariskal Romero, quien destacó que el libro supone «un salto cualitativo» en la bibliografía del heavy en español.

Para Romero, el heavy ha sido «un movimiento ninguneado por los que tenían que haberlo apoyado: los socialistas», aunque «había sido la banda sonora de la Transición». Por eso, celebró la aparición de Inoxidable como un libro necesario para respaldar «una forma de cultura que no ha tenido el sitio que se merece» y un género «que está más vivo que nunca». A los heavys, como ya cantara Barón Rojo, no es fácil hacerlos callar.●

[Fotografías: Javier Paredes.]

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